Troneras de todos los tamaños minan las calles de la comunidad El Vigía, lo que mantiene molestos a los conductores y peatones, quienes sufren las consecuencias de la falta de compromiso y trabajo por parte de la Alcaldía.
Por si fuera poco, los vecinos deben lidiar con alcantarillas en mal estado y los cúmulos de desechos sólidos, que contribuyen con la proliferación de ratas y alimañas.
El llamado es al alcalde Alirio Mendoza para que les tienda la mano de una vez por todas, a fin de que las familias puedan despedir el año con calles libres de basura, drenajes óptimos y vías sin cráteres./MR/at/Foto: Andreina Alemán
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