Afectados piden al alcalde Alirio Mendoza que les dé la cara
Leonardo Favio Oliveros. Alarmados se encuentran los vecinos del sector 23 de Enero, especialmente los que viven en las adyacencias del Instituto Victegui, en la calle Páez de Los Teques, pues parte de un local comercial que está frente a la obra que adelantaba la Alcaldía de Guaicaipuro se vino abajo como consecuencia de la mala calidad de los trabajos.
Surama Patiño, representante del consejo comunal, aseguró que las casas aledañas al lugar corren el mismo riesgo. “Aquí se producirá un efecto dominó y no solo será una sino decenas de familias afectadas, porque con esas labores ahora las aguas negras se han dispersado y no sabemos en qué dirección van”.
Destacó que desde hace tiempo Ingeniería Municipal, las direcciones de Ambiente y Servicios Públicos, Contraloría, antiguo Ministerio de Transporte y Comunicaciones (ahora Transporte Terrestre), Metro Los Teques y hasta el mismo alcalde Alirio Mendoza conocen la situación que ha causado el debilitamiento del terreno, pero no fueron tomados en cuenta, y por eso lucharon hasta que paralizaron la obra.
Por su parte, Rocio Ibarra, quien también forma parte de la organización comunal, refirió que el remedio fue peor que la enfermedad, pues los trabajos realizados por el Ejecutivo local agravaron la problemática y aunque lo denunciaron, no les hicieron caso. Resaltó que la Sala de Batalla Gran Cacique Guaicaipuro está abocada a colaborar y el Alcalde quedó en visitarlos hace dos meses, pero no ha ido.
Lamentaron que no exista una cultura preventiva por parte de las autoridades y que solo actúen cuando se presenten las tragedias. Por ello las exhortaron a solventar la situación, pues consideran que aún están a tiempo de evitar una desgracia.
Como se recordará, la reparación del mega hueco que surgió por la rotura de una tubería de aguas negras frente al colegio fue paralizada hace un mes, cuando estaba a punto de culminarse./at/Foto: Gioersy Mendoza
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